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Cuando las reglas son claras (política interna) y existe un verdadero cambio de cultura (por resultados) la experiencia es ampliamente positiva.

Sin duda alguna el teletrabajo llegó para quedarse. Sin embargo, para apreciar sus reales beneficios se deben valorar todas sus potencialidades. Una de ellas es hoy la principal preocupación de muchos directivos de las empresas quise han visto obligadas a trabajar en su mayoría.

La productividad en esa línea se ha convertido en un talón de aquiles de toda experiencia de adaptación al cambio, a pesar que diversos estudios han demostrado que la tendencia es más favorable que negativa sobre la oportunidad con que cuentan muchos trabajadores de optimizar al máximo sus jornadas laborales.

Uno de los principales elementos de la coyuntura actual consiste en la diferencia entre una relación de teletrabajo regular donde normalmente no se cuenta con convivencia doméstica en casa lo cual versus la de hoy, donde tenemos en casa también distractores que puede terminar minando los mejores esfuerzos de adaptación.

Sin embargo, diversos estudios como el que compartimos de HarvardBusiness School y otros de la Academia Internacional de Teletrabajo han demostrando que en el teletrabajo si se puede ser productivo y si favorece realmente a la organización como un potencial retorno organizacional, muchas veces no apreciado por haberse centrado la política de trabajo como una opción de trabajo flexible apuntando esencialmente a los beneficios que puede aportar al colaborador y no por añadidura a la organización.

Nuestra experiencia desarrollada en los últimos años y en los proyectos de implementación nos ha demostrado que la productividad no desciende, que desde ya es cuando menos algo beneficioso para la famosa preocupación empresarial, sin embargo el impacto dependerá de la determinación adecuada de metas, estrategias de comunicación y seguimiento permanente, así como el establecimiento de indicadores de progresión que permitan visualizar con mejor medida el impacto real de la teletrabajabilidad del proyecto.

Compartimos a continuación, uno de los estudios citado aquí.

Lima, 09 de junio de 2020.

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